Bosquejo:
Si Dios tiene el poder de interrumpir la maldad e injusticia ¿Por qué no lo hace?
Comprendo la soberanía de Dios, cuando:
1. Descubro que a Dios le falta autoridad:
Génesis 1:27-28 “27 Y Dios creó al ser humano a su imagen; lo creó a imagen de Dios. Hombre y mujer los creó, 28 y los bendijo con estas palabras: «Sean fructíferos y multiplíquense; llenen la tierra y sométanla; dominen a los peces del mar y a las aves del cielo, y a todos los reptiles que se arrastran por el suelo.»” NVI
Salmos 8:3-9 “3 Cuando contemplo tus cielos, obra de tus dedos, la luna y las estrellas que allí fijaste, 4 me pregunto: «¿Qué es el hombre, para que en él pienses? ¿Qué es el ser humano, para que lo tomes en cuenta?» 5 Pues lo hiciste poco menos que los ángeles, y lo coronaste de gloria y de honra: 6 lo entronizaste sobre la obra de tus manos, todo lo sometiste a su dominio; 7 todas las ovejas, todos los bueyes, todos los animales del campo, 8 las aves del cielo, los peces del mar, y todo lo que surca los senderos del mar. 9 Oh Señor, soberano nuestro, ¡qué imponente es tu nombre en toda la tierra!” NVI
Salmos 115:16 “Los cielos le pertenecen al Señor, pero a la humanidad le ha dado la tierra.” NVI
Salmos 24:1 “Del Señor es la tierra y todo cuanto hay en ella, el mundo y cuantos lo habitan;” NVI
2. Entiendo que soy tan malvado como cualquier otra persona:
Romanos 3:22b-23 “22 De hecho, no hay distinción, 23 pues todos han pecado y están privados de la gloria de Dios,” NVI
Romanos 7:18-25 “18 Yo sé que en mí, es decir, en mi naturaleza pecaminosa no existe nada bueno. Quiero hacer lo que es correcto, pero no puedo. 19 Quiero hacer lo que es bueno, pero no lo hago. No quiero hacer lo que está mal, pero igual lo hago. 20 Ahora, si hago lo que no quiero hacer, realmente no soy yo el que hace lo que está mal, sino el pecado que vive en mí. 21 He descubierto el siguiente principio de vida: que cuando quiero hacer lo que es correcto, no puedo evitar hacer lo que está mal. 22 Amo la ley de Dios con todo mi corazón, 23 pero hay otro poder dentro de mí que está en guerra con mi mente. Ese poder me esclaviza al pecado que todavía está dentro de mí. 24 ¡Soy un pobre desgraciado! ¿Quién me libertará de esta vida dominada por el pecado y la muerte? 25 ¡Gracias a Dios! La respuesta está en Jesucristo nuestro Señor. Así que ya ven: en mi mente de verdad quiero obedecer la ley de Dios, pero a causa de mi naturaleza pecaminosa, soy esclavo del pecado.” NTV
3. Celebro que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien:
Romanos 8:28-30 “28 Y sabemos que Dios hace que todas las cosas cooperen para el bien de quienes lo aman y son llamados según el propósito que él tiene para ellos. 29 Pues Dios conoció a los suyos de antemano y los eligió para que llegaran a ser como su Hijo, a fin de que su Hijo fuera el hijo mayor de muchos hermanos. 30 Después de haberlos elegido, Dios los llamó para que se acercaran a él; y una vez que los llamó, los puso en la relación correcta con él; y luego de ponerlos en la relación correcta con él, les dio su gloria.” NTV
Apocalipsis 3:20 “»¡Mira! Yo estoy a la puerta y llamo. Si oyes mi voz y abres la puerta, yo entraré y cenaremos juntos como amigos.” NTV